¿El estrés te está haciendo sentir enojado y malhumorado? Los métodos para aliviar el estrés pueden ayudarte a recuperar la calma y la paz en tu vida ocupada. No necesitas dedicar mucho tiempo o pensamiento a estos métodos. Si tu estrés se está saliendo de control y necesitas un alivio rápido, prueba uno de estos consejos.
Para manejar el estrés de manera efectiva, debes pensar en tu salud física, la forma en que interactúas con los demás y tus metas y prioridades en la vida, es decir, lo que consideras verdaderamente importante. Este artículo revisará algunos principios prácticos que pueden ayudarte a manejar mejor el estrés y, quizás, incluso reducirlo.
Consejos para Dominar el Estrés
· ACTÍVATE Cualquier actividad física puede ayudar a aliviar el estrés, incluso si no estás en buena forma. El ejercicio aumenta las sustancias químicas que te hacen sentir bien en tu cerebro, mejora tu estado de ánimo y desvía tu atención del estrés diario. Así que, sal a caminar, trotar, jardinear, limpiar, andar en bicicleta, nadar o hacer cualquier cosa que te haga moverte.
· COME UNA DIETA SALUDABLE Mantén una dieta saludable incluyendo una variedad de alimentos ricos en nutrientes. Concéntrate en frutas, verduras, granos enteros, proteínas magras y grasas saludables. Una dieta equilibrada proporciona las vitaminas y minerales que tu cuerpo necesita para funcionar bien, aumenta la energía, apoya tu sistema inmunológico y ayuda a manejar el estrés. Evita los alimentos procesados, el exceso de azúcar y las grasas poco saludables, ya que pueden afectar negativamente tu estado de ánimo y salud en general. Recuerda, comer bien nutre tanto tu cuerpo como tu mente.
· EVITA HÁBITOS NO SALUDABLES Evita hábitos no saludables que puedan afectar negativamente tu bienestar físico y mental. Estos hábitos pueden parecer ofrecer un alivio temporal, pero pueden causar daños a largo plazo. Algunos hábitos no saludables comunes a evitar incluyen:
i. Fumar: Aunque puede parecer relajante, fumar daña casi todos los órganos del cuerpo, aumentando el riesgo de enfermedades graves y reduciendo la salud general.
ii. Consumo excesivo de alcohol: Beber demasiado puede llevar a malas decisiones, interrumpir el sueño y aumentar la ansiedad y la depresión con el tiempo.
iii. Comer en exceso o comer de manera poco saludable: Comer emocionalmente, comer en exceso o depender de comida chatarra puede causar aumento de peso, baja energía y problemas de salud, lo que lleva a un aumento del estrés.
iv. Exceso de cafeína y azúcar: Demasiada cafeína o azúcar puede provocar caídas de energía, ansiedad y patrones de sueño interrumpidos.
v. Procrastinación: Dejar las cosas para después puede aumentar el estrés y la ansiedad. Desarrollar buenos hábitos como la gestión del tiempo puede ayudar a reducir la tentación de procrastinar.
vi. Descuidar el descanso y la relajación: Ignorar la necesidad de descansos regulares o de sueño puede llevar al agotamiento, la irritabilidad y una mala concentración mental.
· MEDITA La meditación es una práctica simple que ayuda a reducir el estrés y traer calma interior. Mejora la concentración, el equilibrio emocional y la autoconciencia. Al meditar regularmente, puedes manejar mejor el estrés, mejorar el sueño y sentirte más en paz. Hay diferentes formas de meditar, como:
· Mindfulness: Concéntrate en tu respiración y mantente presente en el momento.
· Meditación guiada: Escucha a alguien que te guíe a través de imágenes o pensamientos relajantes.
· Mantra: Repite una palabra o frase calmante para mantenerte enfocado.
· Bondad amorosa: Practica enviar sentimientos de amabilidad y compasión hacia ti mismo y hacia los demás.
· RÍE MÁS Tener un buen sentido del humor no resolverá todos tus problemas, pero puede mejorar tu estado de ánimo, incluso si al principio tienes que fingir una risa. Reír aligera tu carga mental y desencadena cambios físicos positivos en tu cuerpo. Activa y luego calma tu respuesta al estrés. Así que, lee chistes, comparte risas, mira una comedia o pasa tiempo con tus amigos divertidos. También podrías considerar probar el yoga de la risa.
· CONÉCTATE CON LOS DEMÁS Cuando te sientes estresado e irritable, puedes querer aislarte, pero es mejor acercarte a familiares y amigos. Solo un amigo solidario puede hacer la diferencia. Las conexiones sociales son excelentes para aliviar el estrés. Proporcionan distracción, apoyo y te ayudan a afrontar los altibajos de la vida. Considera tomar un café con un amigo, enviar un correo electrónico a un familiar o visitar tu lugar de culto. Si tienes más tiempo, piensa en hacer voluntariado para una organización benéfica. Es una excelente manera de ayudar a otros mientras también te ayudas a ti mismo.
· AFÍRMATE Puede que quieras hacer todo, pero eso no siempre es posible sin consecuencias. Aprender a decir no o delegar tareas puede ayudarte a gestionar tu lista de pendientes y reducir el estrés. Establecer límites saludables es crucial para tu bienestar, ya que todos tenemos límites físicos y emocionales. Decir que sí puede parecer más fácil para mantener la paz o hacer las cosas, pero puede llevar a un conflicto interno cuando tus necesidades quedan en segundo plano. Ponerte en segundo lugar puede causar estrés, ira y resentimiento, lo que interrumpe tu paz. Recuerda, cuidar de ti mismo debe ser una prioridad.
· PRUEBA EL YOGA Con su serie de posturas y ejercicios de respiración, el yoga es un popular alivio del estrés. El yoga combina disciplinas físicas y mentales que pueden ayudarte a alcanzar la paz del cuerpo y la mente. El yoga puede ayudarte a relajarte y aliviar el estrés y la ansiedad. Prueba el yoga por tu cuenta o busca una clase; puedes encontrar clases en muchas áreas. El yoga Hatha, especialmente, es un buen alivio del estrés debido a su ritmo más lento y movimientos más fáciles.
· DORMIR LO SUFICIENTE El estrés puede llevar a dificultades para dormir. Cuando tienes muchas cosas en mente y numerosas tareas por completar, tu sueño puede verse afectado negativamente. Sin embargo, el sueño es esencial para que tu cerebro y cuerpo se recarguen. La mayoría de los adultos requieren entre 7 y 9 horas de sueño cada noche. La calidad y duración de tu sueño pueden influir significativamente en tu estado de ánimo, energía, concentración y funcionamiento general. Si experimentas problemas de sueño, establece una rutina relajante antes de dormir. Esto podría incluir escuchar música relajante, asegurarte de que tu entorno para dormir sea fresco, oscuro y tranquilo, guardar dispositivos electrónicos y mantener un horario de sueño consistente.
· MANTEN UN DIARIO Llevar un diario de tus pensamientos y sentimientos puede ser una forma efectiva de liberar emociones reprimidas. No te preocupes por qué escribir; simplemente deja que fluya. Escribe lo que te venga a la mente sin preocuparte por la gramática o la ortografía. Permite que tus pensamientos se derramen en papel o en una pantalla. Cuando termines, puedes descartar lo que has escrito o guardarlo para reflexionar más tarde.
· MÚSICA Y CREATIVIDAD Escuchar o tocar música es una excelente manera de aliviar el estrés. Puede distraer tu mente, reducir la tensión muscular y disminuir las hormonas del estrés. Solo sube el volumen y sumérgete en la música. Si la música no es lo tuyo, concéntrate en un pasatiempo que disfrutes, como jardinería, coser, leer o dibujar. Elige actividades que te ayuden a concentrarte en lo que estás haciendo en lugar de estresarte por lo que sientes que deberías estar haciendo.
· BUSCA ASESORAMIENTO Si estás luchando por hacer frente a nuevos factores estresantes o los métodos de autocuidado no están ayudando, podría ser el momento de considerar buscar apoyo profesional. La terapia podría ser beneficiosa si te sientes abrumado o estancado. También vale la pena explorar si te encuentras preocupándote en exceso o teniendo dificultades para manejar las tareas y responsabilidades diarias en el trabajo, el hogar o la escuela. Consejeros o terapeutas capacitados pueden ayudarte a identificar las causas raíz de tu estrés y equiparte con estrategias efectivas para manejarlo.