¿Qué es el asesoramiento psicológico?

Es el proceso que tiene lugar cuando un cliente y un consejero reservan un tiempo para explorar dificultades que pueden incluir los sentimientos estresantes o emocionales del cliente.

Es el acto de ayudar al cliente a ver las cosas con más claridad, posiblemente desde un punto de vista diferente. Esto puede permitir al cliente centrarse en sus sentimientos, experiencias o comportamiento, con el objetivo de facilitar un cambio positivo.

Una relación de confianza. La confidencialidad es primordial para el éxito del asesoramiento. Un asesor profesional suele explicar su política de confidencialidad. Sin embargo, la ley puede obligarles a revelar información si consideran que existe un riesgo para la vida.

8 beneficios del asesoramiento

1. Menos ansiedad

Tanto si sufre ataques de pánico, pensamientos obsesivos, preocupaciones incesantes o una fobia incapacitante, es importante que sepa que no tiene por qué vivir con ansiedad y miedo. El tratamiento puede ayudar y, para muchos problemas de ansiedad, la terapia suele ser la opción más eficaz. La terapia puede ayudarle a descubrir las causas subyacentes de sus preocupaciones y miedos; a aprender a relajarse; a contemplar las situaciones de formas nuevas y menos aterradoras; y a desarrollar mejores habilidades de afrontamiento y resolución de problemas. La terapia te da las herramientas para superar la ansiedad y te enseña a utilizarlas

2. Mayor confianza en uno mismo

La autoconfianza es un sentimiento o creencia de que uno es capaz de manejar cualquier cosa. Es la sensación de que tu opinión importa y de que los demás te respetan.

La confianza hace que una persona crea y sienta que tiene algo que ofrecer, y la saca de su zona de confort desafiándola a asumir riesgos, explorar nuevas oportunidades, aspirar a más en la vida, conquistar retos y aceptar el fracaso en el camino hacia el éxito.

3. Recuperar el equilibrio emocional

La salud emocional es una parte importante de la salud general. Las personas emocionalmente sanas controlan sus pensamientos, sentimientos y comportamientos. Son capaces de afrontar los retos de la vida. Pueden mantener los problemas en perspectiva y recuperarse de los contratiempos. Se sienten bien consigo mismas y tienen buenas relaciones.

Estar emocionalmente sano no significa ser feliz todo el tiempo. Significa que eres consciente de tus emociones. Puedes manejarlas, ya sean positivas o negativas. Las personas emocionalmente sanas siguen sintiendo estrés, ira y tristeza. Pero saben gestionar sus sentimientos negativos. Saben cuándo un problema es más de lo que pueden manejar por sí solas. También saben cuándo pedir ayuda a su médico.

4. Aumentar la asertividad

Ser asertivo te permite comunicar tus deseos y necesidades con más autoridad sin dejar de ser justo y empático. También puede ayudarle a tener más confianza en sí mismo e incluso a mejorar su salud mental. Requiere ser franco sobre tus deseos y necesidades, sin dejar de tener en cuenta los derechos, necesidades y deseos de los demás. Cuando eres asertivo, estás seguro de ti mismo y sacas fuerzas de ello para transmitir tu punto de vista con firmeza, justicia y empatía.

5. Resolución de traumas

La resolución del trauma estabiliza al paciente mientras se encuentra en su estado traumático actual y crea una sensación de seguridad a partir de acontecimientos traumáticos anteriores. Un proceso básico en la resolución del trauma es permitir que la persona haga el duelo y recuerde los acontecimientos angustiosos. El paciente puede utilizar la meditación de atención plena, por ejemplo, para centrarse en las sensaciones relacionadas con el trauma y centrarse en el momento presente. Este proceso ayuda al paciente a recordar experiencias que pueden haber causado el trauma, permitiéndole expresarlo.

6. Capacidad para establecer límites

Establecer y mantener límites puede ser importante para su identidad, bienestar emocional, relaciones y seguridad. Los límites saludables pueden controlar sus sentimientos, tiempo, interacciones y espacio físico. Los límites no tienen por qué significar separarse de los demás. Por el contrario, pueden significar establecer formas sanas de permanecer conectado al tiempo que te mantienes fiel a ti mismo. Respetar los límites de los demás también puede ayudarte a mantener relaciones sanas y apoyar el bienestar de los que te rodean.

7. Alivio del estrés

Todos nos enfrentamos al estrés cada día, independientemente del tipo de trabajo que tengamos, de nuestras responsabilidades o de nuestra situación económica actual. Todo el mundo se enfrenta a algún tipo de estrés. La forma en que lo afrontamos es lo que diferencia a las personas tranquilas y cómodas de las ansiosas y nerviosas. Pero si puedes aprender eficazmente cómo reducir el estrés, puedes dar los pasos necesarios para recuperar el control de tu vida y ser una persona mucho más feliz en general.

8. Mejores relaciones

Las relaciones sanas con tu pareja y tus familiares pueden mejorar tu vida y hacer que todos se sientan bien consigo mismos. Las relaciones sanas tardan tiempo en construirse y hay que trabajar para mantenerlas sanas. Cuanto más esfuerzo positivo pongas en una relación, más sana será.

¿Qué puede esperar?

El asesoramiento psicológico le ofrece un entorno seguro y sin prejuicios en el que puede explorar y discutir cualquier problema que pueda pesarle en el pasado o en el presente.

Es un lugar donde puede desarrollar su potencial de crecimiento y ayudarle a llegar a un conocimiento más profundo de sí mismo, recuperando la confianza y la autoestima.

Se trata de ofrecerte un apoyo empático que te permita afrontar cambios vitales que pueden ser una experiencia gratificante y sanadora.