El proceso mediante el cual el cuerpo convierte los alimentos en energía se llama metabolismo. Es un sistema complicado que descompone proteínas, lípidos y carbohidratos, además de liberar hormonas y otros compuestos que el cuerpo necesita para sobrevivir. Comprender el metabolismo te ayudará a tomar decisiones más acertadas sobre tu estado físico y de salud. El metabolismo es un componente necesario de la vida.

Las dos principales clasificaciones del metabolismo son el gasto energético total (GET) y la tasa metabólica basal (TMB). El cuerpo utiliza su tasa metabólica basal (TMB) para alimentar procesos vitales como la respiración y la frecuencia cardíaca. El gasto energético total (GET) del cuerpo durante el transcurso de un día abarca la energía utilizada para el ejercicio, la digestión y otras tareas físicas.

Las diferencias individuales en la tasa metabólica pueden atribuirse a varios factores, incluyendo la edad, el peso, el género y el estilo de vida. También es crucial recordar que enfermedades como la diabetes, el hipotiroidismo y la obesidad pueden tener un impacto en el metabolismo.

Metabolismo

Además de otras sustancias, las hormonas controlan el metabolismo del cuerpo. Hormonas como la insulina y el glucagón controlan cómo reacciona el cuerpo a las comidas y cómo se descomponen las proteínas, lípidos y carbohidratos. La glándula tiroides regula cómo el cuerpo utiliza la energía, lo cual es otro aspecto importante del metabolismo.

El tipo y cantidad de alimentos ingeridos tienen un impacto en el metabolismo del cuerpo. El cuerpo convierte lípidos, proteínas y carbohidratos en energía cuando se ingieren alimentos. La glucosa, la principal fuente de energía del cuerpo, se produce cuando se descomponen los carbohidratos. Los aminoácidos, que se utilizan en el crecimiento y reparación de tejidos, se producen cuando se descomponen las proteínas y los lípidos, respectivamente.

La dieta y el ejercicio afectan el metabolismo

Tanto el ejercicio como la dieta tienen un impacto significativo en el metabolismo. Un metabolismo saludable se puede mantener al consumir una dieta equilibrada rica en frutas, verduras, cereales integrales, carnes magras y grasas saludables.

El metabolismo también puede modificarse mediante el ejercicio. Mantener un peso saludable y acelerar el metabolismo del cuerpo se puede lograr con ejercicio regular. Además, el entrenamiento de resistencia ayuda al crecimiento muscular, lo que aumenta el gasto energético total. Ganar músculo es una estrategia muy recomendada tanto para la reducción como para el mantenimiento del peso, ya que es una de las estrategias más efectivas para aumentar tu metabolismo.

Un peso saludable se puede mantener y se puede alcanzar la tasa metabólica ideal del cuerpo con una dieta equilibrada y ejercicio frecuente.

Estrategias de manejo del peso

• Alimentación saludable:

Adoptar una dieta equilibrada que incluya una variedad de frutas, verduras, cereales integrales, proteínas magras y grasas saludables puede ayudar a controlar la ingesta calórica y proporcionar nutrientes esenciales para la salud en general.

• Control de porciones:

Ser consciente del tamaño de las porciones puede prevenir comer en exceso y ayudar a controlar la ingesta calórica. El uso de platos más pequeños, medir las porciones y prestar atención a las señales de hambre y saciedad pueden ser estrategias útiles.

• Ejercicio regular:

Participar en actividad física regular puede ayudar en el manejo del peso al quemar calorías, aumentar el metabolismo y mejorar la condición física en general. Apunta a realizar al menos 150 minutos de ejercicio de intensidad moderada o 75 minutos de ejercicio de alta intensidad cada semana, junto con actividades para fortalecer los músculos en dos o más días.

• Cambios en el estilo de vida:

Hacer cambios de estilo de vida sostenibles, como dormir lo suficiente, manejar el estrés y evitar el consumo excesivo de alcohol, puede apoyar los esfuerzos de manejo del peso. Estos factores pueden afectar el apetito, el metabolismo y el comportamiento relacionado con las elecciones alimenticias.

• Estrategias conductuales:

Adoptar comportamientos y hábitos saludables, como llevar un diario alimenticio, establecer metas realistas, buscar apoyo de amigos o un profesional de la salud y practicar la alimentación consciente, pueden contribuir al éxito a largo plazo en el manejo del peso.

• Seguimiento del progreso:

Hacer un seguimiento del peso, la ingesta de alimentos, la actividad física y otros factores relevantes puede ayudar a las personas a mantenerse responsables e identificar áreas para mejorar. El seguimiento regular permite hacer ajustes al plan de manejo del peso según sea necesario.