La enfermedad pulmonar crónica de las vías respiratorias inferiores (CLRD, por sus siglas en inglés) es la cuarta causa principal de mortalidad en los Estados Unidos y es un conjunto de trastornos que afectan los pulmones y las vías respiratorias. La CLRD comprende la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), el asma, el enfisema y la bronquitis crónica, que son cuatro enfermedades que a menudo se superponen.
Otros factores de riesgo incluyen partículas y productos químicos en el entorno laboral, la contaminación del aire y las infecciones recurrentes de las vías respiratorias inferiores durante la infancia, además del humo del tabaco. A pesar de que las enfermedades CRD no tienen cura, una variedad de tratamientos que ayudan a despejar las vías respiratorias y a aliviar la falta de aire pueden ayudar en el manejo de los síntomas y mejorar la calidad de vida de los afectados.
El objetivo principal del Programa de Enfermedades Respiratorias Crónicas de la OMS es brindar asistencia a los Estados Miembros en sus esfuerzos por disminuir la carga de mortalidad prematura, morbilidad y discapacidad asociadas con afecciones respiratorias crónicas, con un enfoque particular en la enfermedad pulmonar obstructiva crónica y el asma.
DIAGNÓSTICO
Un examen físico completo, un historial clínico detallado y una evaluación de la función pulmonar son las principales formas en que se diagnostican las CLRD. Sin embargo, pueden ser necesarias pruebas más específicas para cada enfermedad para afinar el diagnóstico.
La mayoría de las enfermedades del tracto respiratorio inferior se diagnostican con una combinación de las siguientes pruebas:
• Análisis de sangre como gases en la sangre arterial (ABG) y un hemograma completo (CBC)
• Pruebas de función pulmonar como la medición del flujo espiratorio máximo (PEFR) y la espirometría
• Radiografías del tórax, que a menudo se utilizan para respaldar un diagnóstico y pueden mostrar inflamación en los pulmones
• Oximetría de pulso
• Capacidad de ejercicio
SINTOMAS
Como se mencionó anteriormente, la enfermedad pulmonar crónica de las vías respiratorias inferiores es un término general para enfermedades pulmonares. Los síntomas comunes a la mayoría de estas enfermedades son:
• Falta de aire
• Silbidos en el pecho
• Aumento en la producción de mucosidad (esputo)
• Tos crónica
• Palpitaciones
• Fatiga
Los síntomas adicionales pueden variar dependiendo de la condición subyacente:
La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) dificulta que el aire entre y salga de los pulmones. Los síntomas incluyen tos persistente, falta de aire, expectoración de mucosidad y una sensación de opresión en el pecho.
- Bronquitis crónica: Inflamación y enrojecimiento de los revestimientos de las vías respiratorias.
- Asma: El humo, el polen, los virus y otros desencadenantes pueden causar silbidos en el pecho, tos, falta de aire y opresión en el pecho en las personas con asma. Durante los ataques de asma, los síntomas pueden empeorar.
4 Remedios Caseros y Estilo de Vida
El estilo de vida afecta en gran medida la gravedad y el desarrollo de la EPOC. Todos los tratamientos deben comenzar con cambios saludables en el estilo de vida. El tratamiento debe ir más allá de los medicamentos.
1. Dejar de fumar. Dejar de fumar es el tratamiento más importante para la EPOC. Fumar es la principal causa de la EPOC y empeora los síntomas. Para algunos, dejar de fumar es suficiente para controlar los síntomas de la EPOC y evitar la progresión de la enfermedad.
2. Ejercicio regular. El ejercicio regular mejora la salud. Puede mejorar la función pulmonar y la capacidad de los pacientes con EPOC. También ayuda a mantener la fuerza muscular y la resistencia.
3. Ejercicios de respiración. Respirar con dificultad agota el diafragma. Los pacientes con EPOC pueden fortalecer sus diafragmas y aumentar la oxigenación celular con ejercicios de respiración.
4. Consumir suficientes calorías. Los medicamentos, el cansancio y los problemas respiratorios reducen el apetito y provocan pérdida de peso. Esto puede empeorar los síntomas de la EPOC y aumentar el riesgo de infección (lo que aumenta el riesgo de exacerbación).
La EPOC es la tercera causa más común de cuidado en el hogar, después de la insuficiencia cardíaca congestiva y el accidente cerebrovascular (39), y fue la segunda discapacidad de la Seguridad Social después de la enfermedad coronaria (8). Una encuesta de la Asociación Americana del Pulmón en 2001, "Enfrentando la EPOC en América", encontró que millones de estadounidenses tienen EPOC que afecta su vida cotidiana (40). Más de la mitad (51%) de los pacientes con EPOC afirmaron que les impedía trabajar. Mientras realizaban tareas domésticas ligeras (46%) o se lavaban y se vestían (44%), casi la mitad se quedaba sin aliento. Durante la conversación, el 32% de las personas se quedaban sin aliento, y el 28% tenía dificultad para respirar incluso estando sentados o acostados. Alrededor del 25% dijo que la EPOC los volvía inválidos, y el 8% tenía tanto falta de aliento que no podían salir de casa.